"La Cuadra", una habitación rústica que en tiempos pasados fungía como el cobijo para los animales de labranza en las casas de campo. Al ingresar, te envuelve una sensación de nostalgia y autenticidad que solo puede provenir de un lugar con una historia arraigada en la vida rural.
El suelo de piedra pulida bajo tus pies te recuerda la función original de este espacio: proporcionar un ambiente resistente y fácil de limpiar para los animales. Las paredes lisas, ofrecen un telón de fondo simple pero encantador para el ambiente.
Las vigas de madera maciza, robustas y desgastadas por el tiempo, se extienden por el techo, agregando un toque de calidez y carácter a la habitación. Su presencia evoca la habilidad artesanal y la destreza de generaciones pasadas que construyeron y mantuvieron este espacio.
A pesar de su antiguo propósito, "La Cuadra" ha sido transformada en un espacio habitable y acogedor.
En resumen, "La Cuadra" es mucho más que un simple habitáculo de animales; es un testimonio vivo del pasado agrícola y una ventana al encanto rústico y la simplicidad de la vida en el campo.